COETZEE, J.M.
Un día el Imperio deicidó que los bárbaros eran una amenaza a su integridad. Primero llegaron al p uebla fronterizo policías, que detuvieron sobre todo a quienes no eran bárbaros pero sí diferentes. Torturaron y asesinaron. Después llegaron los militares. Muchos. Preparados para realizar heroicas campañas militares.