GARCIA DUSSAN, PABLO
Nerón hace arder la ciudad sopesa el pasado y el presente y accede a través de la voz de Manuelita Sáenz, Fanny Mikey, Jorge Isaacs y John F. Kennedy a una historia real matizada con pincelazos de ficción que, de manera hábil, termina superando, al contrario del dicho, la realidad. Sus historias revelan el devenir de la nación, sus errores y aciertos. Así mismo, ni la avalancha de Armero ni el Bogotazo desentonan con el idilio tormentoso de Soledad Román y Rafael Núñez, ni la bomba del Teatro Nacional, puesta durante el I Festival Iberoamericano, desencaja con el asesinato de José Asunción Silva, pues se trata de una misma sociedad y, en últimas, de una misma historia. Sus personajes hacen tambalear ídolos con pies de barro y sacan a la luz los secretos nacionales, como por ejemplo, que en 1854 tuvimos un presidente indígena; por qué Camilo Torres se enroló en la subversión; quién asesinó a Gaitán; que Bolívar nunca quiso exiliarse; por qué borraron de los nominados al Premio Nobel de Literatura a Fernando González Ochoa, incluso, qué opinión se llevó de Colombia, Jorge Luis Borges en su última visita.